Es un adjetivo de la misma familia que el sustantivo "secta" que se usa mucho para (des)calificar a otra persona o grupo al que no pertenecemos. Porque uno nunca es sectario.
Me sabe mal hablar de política porque tengo familiares y amigos que están afiliados a distintos partidos y es difícil no ofenderles. El problema es que me parece que la llamada "crispación" procede de ese mundo... y siempre la origina el contrincante. Algo parecido a lo que sucedía con el adjetivo sectario.
Como yo siempre he pertenecido a "sectas" -lo digo "animus iocandi"- cansado de que mis interlocutores me hayan hecho sentirme mal por ello, al hilo de un debate político en internet, he decidido no dejar títere con cabeza y desde la equidistancia -real o no- he aplicado el adjetivo sectario a los partidos políticos porque en sus actitudes radica gran parte del enfrentamiento social:
¿Secta es hacer lo que dice el jefe? ¡como los partidos políticos!
¿Secta es leer sólo lo que dicen los jefes? ¡como los partidos políticos!
¿Secta es controlar el acceso a la cultura, medios de comunicación, educación, etcétera, para que nadie se salga del camino? ¡como los partidos políticos y medios de comunicación afines!
¿Secta es rechazar, odiar o dar de lado a quienes no piensan como nosotros? ¡como los partidos políticos y medios afines!
¿Secta es relacionarte sólo con los tuyos? ¡como los partidos políticos!
¿Secta es disimular si perteneces a la secta? ¡como los partidos políticos!
¿Secta es creer que los buenos son los tuyos y que el resto son malos? ¡como los partidos políticos!
¿Secta es creer que los tuyos siempre dicen la verdad y que el resto miente? ¡como los partidos políticos!
¿Secta es partir de unos dogmas inamovibles e incuestionables y escandalizarse cuando alguien los cuestiona para evitar debatir sobre ello? ¡como los partidos políticos!
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